¿Cómo puede un quiropráctico equino ayudar a su caballo?

Muchas personas que montan caballos no consideran el hecho de que, a pesar del mito popular, la espalda de un caballo en realidad no está diseñada para llevar una carga.

Cuando un caballo lleva a un jinete, debe usar sus músculos y equilibrarse de maneras no naturales. Idealmente, los caballos son educados de una manera que fortalece sus músculos, y el jinete se desplaza de una manera que ayuda al caballo a mantener el equilibrio. Desafortunadamente, este no suele ser el caso.

Un caballo que está mal equilibrado y desalineado puede experimentar dolor de espalda, que a menudo se expresa a través de un comportamiento indeseable.

Incluso algunas cojeras se pueden atribuir a la columna vertebral y las disfunciones articulares.

Si bien una buena conducción y una silla de montar adecuada son fundamentales para cuidar la espalda de nuestros caballos, muchos caballos (y jinetes) se benefician del tratamiento quiropráctico, como parte de la atención holística. Los quiroprácticos se centran en las estructuras esqueléticas del caballo y utilizan manipulaciones manuales para devolver estas estructuras a su alineación correcta.

Si su caballo está experimentando alguno de estos síntomas o problemas de comportamiento, el tratamiento quiropráctico puede ser útil:

Una consulta con un quiropráctico equino debe comenzar con un examen minucioso del caballo, incluido el examen de su historial, cuidado y uso.

El quiropráctico puede pedir ver el movimiento del caballo con todos los andares y tal vez incluso montado. Si el quiropráctico se entera de que el ciclista tiene problemas de espalda o movilidad, y está calificado para hacerlo, es posible que también formule recomendaciones o proporcione tratamiento al ciclista. No es raro que el caballo reaccione a la rigidez del conductor.

El quiropráctico utilizará la fuerza manual en ciertos puntos del cuerpo del caballo para que las estructuras que se encuentran debajo vuelvan a la alineación normal. Idealmente, esto restaurará la articulación a la función normal y al rango de movimiento. La primera consulta y el tratamiento pueden tomar una hora o más. Se pueden recomendar citas de seguimiento, por lo general, dentro de una semana del tratamiento inicial, y luego más aparte ya que cualquier problema específico comienza a resolverse.

Algunos veterinarios están capacitados en quiropráctica equina. Algunos quiroprácticos tratan tanto a humanos como a caballos, lo que puede ser útil para determinar cómo los desequilibrios en el jinete afectan al caballo. Las personas que se especializan en quiropráctica pueden complementar su práctica con otras terapias como luces infrarrojas, masaje, liberación miofascial, acupuntura o presión, toque terapéutico o terapia de estrés. La regulación de terapias alternativas como la quiropráctica es diferente de un lugar a otro, por lo que puede ser ideal realizar investigaciones y averiguar qué requisitos se requieren en su área.

Las recomendaciones de boca en boca son una buena indicación de que un quiropráctico ha tenido buenos resultados con otros caballos.

Hay momentos en que no se recomienda el tratamiento quiropráctico. Si su caballo tiene una cojera o un centro de dolor muy específico, es mejor verificar si hay lesión o incluso fractura antes de proceder con el tratamiento quiropráctico. Usar el tratamiento quiropráctico en algunos problemas, especialmente las fracturas no diagnosticadas, puede causar una lesión aún mayor. Siempre consulte con un quiropráctico calificado. De esta forma, puedes estar seguro de que el practicante tiene la capacitación y la experiencia adecuadas.