Tomando el mordisco de la propiedad de las aves
No hay tal cosa como un pájaro malo. ¡Es verdad! Sin embargo, hay pájaros que tienen miedo y aves con problemas emocionales que hacen que quieran evitar el manejo a toda costa. Cuando las aves con estos problemas se encuentran en situaciones de mascotas, puede ser desastroso tanto para el pájaro como para el propietario.
Hay recursos en los que puede aprender la ciencia del análisis del comportamiento aplicado y el refuerzo positivo.
El "Animal Behavior Center" de Lara Joseph es un lugar maravilloso para comenzar. Y si quieres un libro que realmente te ayude a aprender cómo entrenar a tu pájaro, el libro de Karen Pryor, Do not Shoot The Dog , te ayudará a comprender mucho sobre este asombroso método de enseñanza basado en la ciencia.
Si su pájaro mascota lo muerde cuando trata de manejarlo, es fundamental que resuelva el problema. Para hacer esto, debe reservar un tiempo cada día para trabajar en el manejo de su amigo emplumado. Cuando trabaje con su mascota, use los siguientes consejos y técnicas para ayudar a su mascota a entender que el manejo es seguro y divertido.
- Mover a una ubicación neutral. Si es posible, mueva la jaula de su pájaro a un lugar neutral durante las sesiones de entrenamiento. Quitar un pájaro de su "territorio" a veces puede hacer que esté más dispuesto a cooperar con su dueño.
- Tener respeto. Si tu pájaro se lanza contra tus dedos cuando colocas tu mano cerca de ella, trata de no escabullirte de repente por miedo. Sus movimientos rápidos probablemente harán que su pájaro esté aún más nervioso y aprensivo. Lento y fácil es el mejor método. No intentes forzar el contacto. Intenta y deja que el pájaro decida cuándo se siente lo suficientemente cómoda para dar un paso adelante o aceptar un regalo. Esto lleva tiempo y paciencia.
- Use herramientas cuando sea necesario. Entrenar a un pájaro para que se suba sobre un palo o una percha se conoce como "entrenamiento con palo". Se recomienda que entrenes a un pájaro que no puede ser manejado para subir un palo. Esto es menos invasivo y más fácil para una ave que tiene miedo o que ha sido traumatizada en el pasado para aceptar esta forma de moverla sin fuerza.
- Nunca le grites a tu pájaro. Levantar la voz con enojo (o dolor) no hará que su pájaro comprenda que ha hecho mal. De hecho, es más probable que refuerce el mal comportamiento de su ave ya que le encantará obtener una reacción tan grande de usted.
- Intenta llevar regalos. Ofrezca sus golosinas para pájaros y hable con voz suave cuando trate de manejarlo. Usar golosinas y elogios ayudarán a su mascota a estar más dispuesta a interactuar con usted. Si cada interacción con su ave resulta en una experiencia positiva, es más probable que se sienta más cómoda y abierta a una relación más estrecha con usted. Muchas personas intentan forzar la interacción con la esperanza de que esto provoque que el ave deje de resistir y simplemente ceda para ser manipulado. Esto se conoce como "Inundación" y no se recomienda como técnica de entrenamiento. Cuanto más positiva sea la experiencia con su ave, más probabilidades tendrá de entrenar con usted.
- La repetición es clave. Tómese tiempo para trabajar con su ave al menos una vez al día para garantizar el éxito del entrenamiento. A veces lleva un tiempo construir confianza con un pájaro. No te rindas!
- No trabajes demasiado tu pájaro. Mantenga las sesiones de entrenamiento en un máximo de quince minutos al principio. Las aves son criaturas inteligentes y sensibles, y necesitan divertirse un poco para mantener su salud mental y evitar el estrés.
Si sigues estas pautas y haces los esfuerzos necesarios, es probable que puedas entrenar a tu mascota en un tiempo relativamente razonable. Si su ave es tan agresiva que no puede intentar ninguno de estos ejercicios de entrenamiento, lo primero que debe hacer es visitar a su veterinario aviar para descartar cualquier problema de salud. Si no hay razones físicas para el comportamiento indeseable de su mascota, comuníquese con un consultor certificado de comportamiento de loros para obtener una opinión experta sobre su situación.
Editado por: Patricia Sund