Tratamiento de la insuficiencia cardíaca congestiva y otras enfermedades de perros y gatos con furosemida
La furosemida (Lasix) es un medicamento de uso frecuente tanto para perros como para gatos. Es probablemente el diurético más poderoso disponible para ayudar a su perro y felino si su mascota ha sido diagnosticada con insuficiencia cardíaca congestiva y otras afecciones graves relacionadas con la acumulación de líquidos en el cuerpo de su mascota.
También se utiliza para tratar el edema pulmonar, o líquido en los pulmones, que no está relacionado con la insuficiencia cardíaca, así como para ayudar a aliviar una serie de otras enfermedades y afecciones caninas y felinas.
Cómo funciona la furosemida
La furosemida es un diurético, un medicamento que ayuda a reducir la cantidad de líquido en el cuerpo de su mascota al aumentar el volumen de orina que su perro o gato puede pasar.
Más específicamente, se lo conoce como diurético de asa, porque la furosemida actúa sobre el asa de Henle (parte del riñón) para evitar que el riñón reabsorba sodio y cloruro. Debido a que el sodio y el cloruro no se reabsorben, pasa más agua en la orina y, en última instancia, aumenta el volumen de orina producida.
Indicaciones para el uso de furosemida en perros y gatos
Hay varias enfermedades y afecciones en perros y gatos, que la furosemida puede ayudar a tratar.
- La furosemida se usa casi siempre como una línea de tratamiento primaria en casos de insuficiencia cardíaca congestiva en perros y gatos. Se utiliza para eliminar el exceso de acumulación de líquido en los pulmones y otras áreas del cuerpo que acompañan a la insuficiencia cardíaca congestiva en sus mascotas.
- La furosemida también se usa para tratar el líquido en los pulmones que ocurre en enfermedades que no están relacionadas con problemas cardíacos.
- La furosemida se puede usar para tratar la enfermedad renal cuando los riñones se han apagado y han dejado de producir orina.
- De manera similar, la furosemida se puede usar para tratar la enfermedad renal causada por niveles elevados de calcio. Demasiado calcio puede debilitar los huesos y causar cálculos renales.
- La furosemida también se puede recetar para tratar los niveles elevados de potasio en la sangre.
- La furosemida a veces también se usa para tratar la presión arterial alta en perros y gatos.
Posibles efectos secundarios del uso de furosemida en mascotas
Los dueños de mascotas que administran furosemida a sus perros o gatos deben conocer los posibles efectos secundarios del medicamento.
La furosemida puede causar desequilibrios de los electrolitos en el torrente sanguíneo. Estos desequilibrios electrolíticos pueden provocar signos como:
- Beber cantidades excesivas de agua
- Letargo
- Depresión
- Inquietud
- Micción reducida
- Insuficiencia gastrointestinal, incluidos vómitos y diarrea
- Frecuencia cardíaca elevada
- Coma
- Convulsiones
La administración de furosemida también puede provocar una pérdida excesiva de agua y puede causar deshidratación. Si su perro o gato toma el medicamento, es importante controlar la presión sanguínea de su mascota.
En resumen
Los dueños de mascotas que administran furosemida deben conocer los posibles efectos secundarios y alertar a su veterinario si se sospecha una reacción adversa al medicamento.
Tenga en cuenta: este artículo ha sido proporcionado solo con fines informativos. Si su mascota muestra signos de enfermedad, consulte a un veterinario lo más rápido posible.